Por fin quietas y calladitas. ¡Uf! lo que me ha costado dormir a estos ‘angelitos’ que hasta hace un momento brincaban como potrillos salvajes… Y yo ya no estoy para estos trotes, lo que necesito es relajarme y vivir tranquila. Porque voy teniendo una edad… ¿Es que no piensan jubilarme nunca? ¡Ale! Y ahora las zapatillas ¿y por qué no va él a buscarlas? Me tienen de ‘chucha’ para todo… Cualquier día de estos bajo la maleta del altillo y me marcho sin decir ni guau.
Buen título, lo cierto es que hasta el final no he visto la trampa.
ResponderEliminarMe estaba imaginando una señora y me ha dado una penitaaa
Jaaaaaaaaaaa, no lo vi venir.
ResponderEliminarAbrazos!
La última palabra te deja petrificado. Felicidades por otro acierto.
ResponderEliminarMe cazaste!!! Pensé que la cosa iba de maletas...Jaja, muy bueno MJ.
ResponderEliminarUn besote
Sorpresa hasta el final! Muy bueno, MJ.
ResponderEliminarBesos.
Sorprendente el final. A mí me parece que hay un doble sentido, el paralelismo es evidente y creo que muchas amas de casa podrían firmarlo.
ResponderEliminarGenial, genial, genial !!!
Besos!!!!
Peor sería lo de perra muerte, aquí todavía hay solución.
ResponderEliminarBlogsaludos
MJ, me gusta este relato de REC, ¿por qué es así verdad? Muchas mujeres se sienten así por la consideración que les damos, de pensar que son nuestras chachas solo porque es mamá o es mi mujer. Es egoísta sin duda.
ResponderEliminarSuerte para siguientes participaciones en REC.
Un abrazo Artista.
Bien podría tratarse de una señora, no habría mucha diferencia.
ResponderEliminarGracias, Luisa.
Un beso.
¡Bieeeeeeen! ¡Lo conseguí! :-)
ResponderEliminarAbrazos, Patricia.
Gracias, Luismi.
ResponderEliminarTraté de esconder la identidad de la protagonista hasta el final.
Un beso.
Pensé que si ponía una ilustración con un perro, la trama se desvelaría antes de tiempo.
ResponderEliminarGracias, Paloma.
Un beso.
¡Qué bien!
ResponderEliminarUn beso, Sara.
Exacto, ATENEA, diste en el clavo. Eso es precisamente lo que quería reflejar.
ResponderEliminarUn besote.
A veces la vida no es vida o sea como la muerte que es la 'no vida'.
ResponderEliminarUn abrazo, Nel.
Sí, era para REC, pero no lo envié. Se me pasó el plazo sin darme cuenta.
ResponderEliminarGracias y suerte para ti también, Nicolás.
Un abrazo.
Yo no me fié de tu foto y con el "Y ahora las zapatillas" aposté por el perro.
ResponderEliminarAhora bien, no por ello disfrute menos. A mi me ha encantado cómo has delineado el micro y cómo lo has resuelto.
Un abrazo, MJ
:-) Chico listo, Pedro.
ResponderEliminarUn abrazo.
También pensé en una perra... pero es igual también lo he disfrutado.
ResponderEliminarBesitos
Me encantó.
ResponderEliminarDisfruté tanto este micro que me engañó hasta el, para mí, inesperado final.
Un abrazo afectuoso.
Me pillaste ¿eh, Elysa? :-)
ResponderEliminarUn beso, guapa.
Pues me alegra mucho que te haya gustado y sorprendido, Juglar.
ResponderEliminarUn beso.
¡Jo qué dura la vida de las perras! ¿Es igual de dura la vida de los perros?
ResponderEliminarNo sé, igual en esto también hay distinciones.
Un abrazo, buen micro.
La vida puede ser igualmente dura para los perros, por supuesto que sí.
ResponderEliminarUn beso, Gloria.
jejeje, muy guau!!!
ResponderEliminarUn abrazo!
¡Guau guauuu! :-)
ResponderEliminarUn abrazo, Juanlu.
Bueno, hay que tener paciencia MJ, ya llegará el momento en que llegará esa vida soñada y será en el momento perfecto :D
ResponderEliminar¡Jaja! Aunque hable en primera persona, no es mi caso, Gabriel.
ResponderEliminarPero gracias por tus buenos deseos :-)
Un abrazo.
jajajaj muy bueno pobres perros aunque es peor llevar una vida de perros en humanos. Genial
ResponderEliminarBesitos y sonrisas perrunas:-)
Algunos perros viven mejor que las personas.
ResponderEliminarGracias, maja.
Un abrazo.