-¡Además me duele la tripa! –refunfuña Inés-
en un intento desesperado por librarse de semejante tortura. Pero no cuela.
Mamá, experta en hacerse la sorda, e inflexible en asuntos alimenticios, llena nuestros
platos de coliflor y patatas mientras habla con papá de cosas de trabajo. Cuando
mi hermana, tozuda, vuelve a la carga, aprovecho para cambiar mi plato por el
del abuelo, que me mira de reojo y sigue comiendo como si tal cosa…
Mientras espero el pollo, repaso las
ventajas de ser invisible y me doy cuenta de que ya casi no me importa que
ellos me ignoren.
Esta fue mi aportación (salvo las cinco primeras palabras que originalmente eran: "-Y además nos hace daño") a la 1ª edición del Concurso "En 99 palabras" organizado por Miguel Ángel Molina. Acabo de comprobar que no obtuvo ningún voto :-(
De admiten críticas, por supuesto :-)
De admiten críticas, por supuesto :-)
MJ, es un relato de mucho humor, como debe ser todas las infancias.
ResponderEliminarMe gustó el sentido que le diste y el final.
¡Felicidades!
Un abrazo, Artista.
Tú si que sabes levantar el ánimo (un poco alicaído tras conocer el resultado).
EliminarGracias, Nicolás. Me consuela saber que al menos a ti, te gustó :-)
Un abrazo.
Te doy mi opinión, MJ. Sin duda, tu relato no merecía 0 puntos. Está muy bien escrito y yo lo leí varias veces. Pero, en mi opinión, yo creo que echaba para atrás el hecho de que tuviera un inicio por todos conocido. Creo que eso le restó valor. Como sabes, en las primeras lecturas, tienes que ir descartando para tener menos que leer y más tiempo concentrado, y cualquier excusa es buena para hacerlo. Esa es mi opinión.
ResponderEliminarAhora, sin la presión del tiempo, gana mucho A La Chita Callando.
Un abrazo, MJ.
Tienes razón, Miguelángel. Pude haber modificado el inicio (algo forzado), pero me pudo la impaciencia. No sé lo que me pasa en los concursos que me pongo nerviosísima y no soy capaz de dejar reposar los textos. En fin, dicen que de los fracasos y derrotas se aprende. A ver si es verdad :-)
EliminarAgradezco muchísimo tu sinceridad.
Un abrazo.
Te digo como Miguelángel Mj. Pero me gusta ir releyendo los textos y poniendo nombre. No te consolará pero yo tampoco tuve ningún voto jejejejje. Pero eso me da igual me lo estoy pasando pipa, y es bueno tener iniciativas así que te obliguen a escribir con ciertas condiciones.
ResponderEliminarUn besazo desde el aire guapetona :)
Para qué engañarnos, Rosa, ese '0 pelotero' (como decía aquel) no es plato de buen gusto para nadie. Pero a mí me ha servido para tratar de ser menos impulsiva a la hora de participar en cualquier concurso y revisar y releer mis textos antes de enviarlos.
EliminarEn cualquier caso, ha sido un placer participar en este concurridísimo concurso.
Un beso.
Muy conmovedor tu relato, compañera de concurso!!!!
ResponderEliminarBeso admirado
Sé que podía haberle sacado más partido, pero me pudo la impaciencia.
EliminarDe todos modos, gracias mil, Patricia.
Un beso grande.
Coincido con alguna opinión que te han dejado. El relato cobra fuerza en la segunda parte. Tal vez las prisas, dado el elevado grado de participación (según comentarios) no dieron lugar a terminar de leerlo.
ResponderEliminarÁnimo escritora, tu relato es para saborearlo lentamente. El jurado debía de buscar el impacto en los primeros renglones.
Un fuerte abrazo, MJ!!!
Me precipité, eso es cierto, ATENEA. Con un poco más de calma, el texto habría mejorado bastante.
EliminarEl jurado éramos nosotros, los propios concursantes.
Gracias por tus palabras de ánimo :-)
Un besazo.
¿Se admiten también elogios? Me gusta la profundidad que se descubre tras la sencillez y delicadeza del texto. Siempre es un placer leerte.
ResponderEliminarUn abrazo.
¡Jaja! ¡Faltaría más, Sara! Me alegro de que al menos se haya captado el trasfondo de la historia.
EliminarGracias, linda.
Un besazo.
Yo, si me lo permites, MJ, coincido con Miguel Ángel Flores en que ese inicio le ha perjudicado mucho. Reconozco que a mí me echó para atrás, con solo cambiarle el principio el micro hubiera ganado mucho, porque es bueno.
ResponderEliminarUn abrazo,
Te aseguro que pensé en cambiar la forzada frase de inicio ya que en este caso no era obligatoria. Y no habría sido muy complicado modificarla, pero no lo hice :-(
EliminarLección aprendida (espero) jeje.
Un abrazo agradecido, Esperanza.
Cuando lo leí, a mí, el detalle del abuelo, comiendo resignado lo que le da su nieta fantasma, casi me arranca una lágrima. Es supertierno porque muestra la conexión especial que hay entre abuelos y nietos. El principio, es lo de menos. Un beso.
ResponderEliminarHas captado a la perfección el meollo de mi texto. Es muy gratificante para mí saber que te ha gustado, Mar.
EliminarSeguiremos aprendiendo a transmitir sensaciones a través de la escritura.
Un beso admirado y agradecido.
Yo lo leo por primera vez, MJ, porque no llegué a participar en el concurso y por las mismas causas no pude leer los ciento cincuenta relatos participantes.
ResponderEliminarComentaba en otra casilla como esta lo difícil que ha de ser votar entre tantos microrrelatos.
A mí tu micro me ha gustado mucho. Me parece destacable el tono ajustado a la sensibilidad que contiene, el remolino de humor que airea todo el texto. Ignoro si le perjudicó la frase inicial o no. Sólo puedo decirte que cuando lo empecé a leer creí que era tu participación para otro concurso.
En cualquier caso, si esa sequía de votos te ha valido para aprender algo, que sea bienvenida, ¿no?
Un abrazo,
Es evidente que algo falla en este micro, probablemente el principio o tal vez debería haber trabajado algo más el final. No sé.
EliminarAgradezco mucho tu opinión, Pedro.
Un abrazo.
Me gustó MJ ese lado tan tierno entre el abuelo y esa nieta invisible o fantasma. Te digo como Miguelángel esa frase de inicio tan conocida me chirrió y lo dejé en suspenso hasta decidirme al final.
ResponderEliminarBesitos
Sí, lo sé, Elysa. Fue un fallo enorme por mi parte dejar ese inicio. Pero me alegra saber que la trama, a pesar de todo, no ha dejado indiferente a alguno de vosotros.
EliminarGracias por tus palabras, preciosa.
Un besote.
Ja,ja,ja...Yo también obtuve 0puntos y todavía me estoy riendo... Ya, ya me lo pensaré dos veces con tanta competencia...je,je,je. Antes de saberlo lo publiqué...¡Qué más da lo importante es....
ResponderEliminarBesicos
A mí me ha dado de todo menos risa, la verdad :-(
EliminarTrataré de seguir aprendiendo y por supuesto, no dejaré de participar en los concursos que me resulten atractivos.
Un beso, Cabopá.
Qué triste me puso al leerlo. Qué bien contado. Te felicito Mariajo.
ResponderEliminarBesicos.
Gracias, Tor. El tuyo no lo es menos.
EliminarUn abrazo.