Desde entonces escribo.
Desde que mamá me distinguió con el honorable título de "escribidora de cartas".
domingo, 27 de enero de 2013
Cruces
Todos caminamos por la vida con una cruz a cuestas. Algunos se la cuelgan al cuello. Otros la llevan a rastras cual nazarenos... La mía, clavada en la tierra, escolta mi tumba y espera impaciente mi llegada.
Ojo, si las das la vuelta y las empuñas, son espadas. No digo más.
ResponderEliminarAbrazos.
Otra forma de llevar la cruz, sí, señor :-)
EliminarUn abrazo, Amando.
Ufffff deja, que nos espere mucho tiempo...
ResponderEliminarMe ha gustado mucho, mucho MJ.
Besos desde el aire
Exacto. Que no tenemos prisa ¿verdad?
EliminarGracias, Rosa.
Un besote.
Esa cruz que espera y escolta el sepulcro del vivo, mejor la dejamos que espere un buen rato ¿no te parece?.
ResponderEliminarLo peor es lo de cargar con cruces estando vivo...ahí sí que cuesta.
Besos querida, muchos besos.
Sí, Laura, que nos espere mucho tiempo allí.
EliminarMientras tanto, seguiremos cargando con la que nos ha tocado en suerte.
Un abrazote.