Contener el dolor no es casi nunca el mejor sistema, parece que si lo llevamos dentro pesa más. Personalmente prefiero expulsarlo de mi cuerpo,las lágrimas limpian con ese toquecito de sal muchas de las penas... aunque a veces parece que no se acabarán jamás.
Ya echaba de menos tu casa... voy a leer las anteriores.
De momento te dejo en esta mis besos mediterráneos.
El dolor es un misterio universal e inevitable que sobrecoge y desconcierta al ser humano. Con frecuencia se proponen fórmulas más o menos anestésicas - resignación pasiva, escapismo, anulación de la voluntad...y por qué no, algo tan difícil para algunos, como es llorar -; pero en ningún caso resuelven las preguntas que todo hombre se hace: ¿ Qué sentido tiene el sufrimiento ? De cada uno depende que su dolor sea de agonía o de parto. El dolor no se puede impedir, pero sí se puede lograr que no nos aniquile. El sufrimiento sólo puede tener sentido si es relativo. ¿ Es excesiva la esperanza en la transformación del sufrimiento en alegría ? Es, desde luego, una eleveda esperanza, pero cuenta con la mayor garantía imaginable: el futuro.
Un corazón lleno de lágrimas, es un corazón oprimido. Las lágrimas limpian y sanan. Me han gustado tus micros de tu participación en las justas, siento estar tan retrasada en mis lecturas, tarde pero llego. :)
Urgia aprender a llorar!!! (la gran frase esperanzadora). Desde el momento en el que se reconoce y se acepta la deficiencia: "no sabe llorar", ya es un paso adelante, importante. Se está más cerca de la solución. Y casi todo tiene solución, aunque haya momentos en los que no lo creamos.
MJ, precioso y contundente hiperbreve. El que no sabe llorar o no lo practica corre el riesgo de convertirse en un globo repleto de agua y explotar un día sin remedio.
Llorar es parte de la vida y cuando se necesita hacerlo, no hay que dudarlo.
Hay personas muy lloronas y otras que no lloran nunca. Personalmente, creo que una buena llorera ante cualquier disgusto, dolor o infortunio, te dejan como nueva :-)
Cuando el dolor o la pena son intensos, pero la rabia, la vergüenza o el orgullo lo son más, el contener el llanto se asume como valentía (casi siempre absurda) que daña solo al que reprime su sentir. Se piensa que quien llora demuestra cobardía, sin tomar en cuenta que valiente no es el que no llora, sino el que no claudica. Cuando la adversidad sobrepasa nuestras fuerzas, vale llorar, lo que no vale es rendirse. ¡Saludos!
¿Qué pasa cuando estás demasiado asustado como para llorar? ¿Qué pasa si piensas que no sirve de nada? Vale; sí, te aligera emocionalmente y te alivia en cierto sentido porque descargas tensión, pero, ¿sirve para algo más? ¿De qué sirve llorar? Y estoy de acuerdo con lo de que la última frase es impactante.
Y ¿qué más quieres? ¿no es suficiente el efecto válvula de escape? Está claro que llorar no soluciona los problemas, pero de alguna manera los aligera. Gracias por comentar, Anónimo.
Contener el dolor no es casi nunca el mejor sistema, parece que si lo llevamos dentro pesa más.
ResponderEliminarPersonalmente prefiero expulsarlo de mi cuerpo,las lágrimas limpian con ese toquecito de sal muchas de las penas... aunque a veces parece que no se acabarán jamás.
Ya echaba de menos tu casa... voy a leer las anteriores.
De momento te dejo en esta mis besos mediterráneos.
El dolor contenido es como una olla a presión. Las lágrimas serían la válvula para que no explote.
EliminarMe alegro verte de nuevo, Gala :-)
Un besazo.
Sí, porque todas las lágrimas de desamor se almacen en él.
ResponderEliminarMuy bonito MJ; muy triste también.
Un beso
Así es, Paloma.
EliminarGracias, bonita.
Un beso.
Querida María José:
ResponderEliminarEl dolor es un misterio universal e inevitable que sobrecoge y desconcierta al ser humano. Con frecuencia se proponen fórmulas más o menos anestésicas - resignación pasiva, escapismo, anulación de la voluntad...y por qué no, algo tan difícil para algunos, como es llorar -; pero en ningún caso resuelven las preguntas que todo hombre se hace: ¿ Qué sentido tiene el sufrimiento ?
De cada uno depende que su dolor sea de agonía o de parto. El dolor no se puede impedir, pero sí se puede lograr que no nos aniquile. El sufrimiento sólo puede tener sentido si es relativo. ¿ Es excesiva la esperanza en la transformación del sufrimiento en alegría ? Es, desde luego, una eleveda esperanza, pero cuenta con la mayor garantía imaginable: el futuro.
Un beso.
El dolor forma parte de nosotros, amigo mortal. Cada cual debería saber cómo mitigarlo.
EliminarUn abrazo.
Un corazón lleno de lágrimas, es un corazón oprimido. Las lágrimas limpian y sanan.
ResponderEliminarMe han gustado tus micros de tu participación en las justas, siento estar tan retrasada en mis lecturas, tarde pero llego. :)
Besazos desde el aire
Gracias, ocupadísima Rosa :-)
EliminarUn besote.
Urgia aprender a llorar!!! (la gran frase esperanzadora).
ResponderEliminarDesde el momento en el que se reconoce y se acepta la deficiencia: "no sabe llorar", ya es un paso adelante, importante. Se está más cerca de la solución. Y casi todo tiene solución, aunque haya momentos en los que no lo creamos.
Un beso y una sonrisa:)
Exacto, Petra. Es la válvula de escape :-)
EliminarGracias por leerme.
Un beso.
MJ, precioso y contundente hiperbreve. El que no sabe llorar o no lo practica corre el riesgo de convertirse en un globo repleto de agua y explotar un día sin remedio.
ResponderEliminarLlorar es parte de la vida y cuando se necesita hacerlo, no hay que dudarlo.
Me gusto mucho.
Un abrazo, Artista.
Hay personas muy lloronas y otras que no lloran nunca. Personalmente, creo que una buena llorera ante cualquier disgusto, dolor o infortunio, te dejan como nueva :-)
EliminarUn abrazo, Nicolás.
En este breve, la fuerza cae sobre "urgía aprender" Muy, muy bueno, MJ!!!
ResponderEliminarSí, ahí está el meollo.
EliminarGracias, Sandra.
Un abrazo.
Y tanto que hay que llorar para ser más naufrago.
ResponderEliminarLuisa, ya veo que te has equivocado (no me cuadraba :-)
EliminarVoy a repetir que he escrito lo contrario de lo que quería:
ResponderEliminarY tanto que hay que llorar para No ser más naufrago
Muy buena frase, Luisa.
EliminarUn abrazo.
Qué pena no saber llorar!
ResponderEliminarMuy bonito, mucho.
Abrazos
Debe de ser muy triste no saber llorar, sí.
EliminarUn beso, Ana.
La última frase es muy rotunda, tiene mucha fuerza. Bellísimo. Un beso.
ResponderEliminarGracias, Mar :-)
EliminarUn beso.
Extraordinario, M.J.
ResponderEliminarEse "Urgía aprender a llorar" casi es un hiperbreve en si mismo.
Un abrazo.
Agradezco tu calificativo, Pedro :-)
EliminarUn abrazo.
Qué cierto, MJ, qué cierto. El llanto que no sale anega el corazón, u otros órganos vitales. Muy bueno.
ResponderEliminarUn abrazo.
Lloremos pues, para que no se nos inunde el corazón de pena. Y después... ¡¡Riamos!! :-)
EliminarUn abrazo, Miguelángel.
Las lágrimas no son en sí el remedio, pero nos ayudan a descargar el dolor.
ResponderEliminarMuy bello este texto, MJ.
Besos.
Claro que no son el remedio, Sara, pero sí muy necesarias ¿verdad?
EliminarUn beso.
Es importante echar el dolor fuera y las lágrimas ayudan bastante.
ResponderEliminarBello y elegante texto !!!
Besos, MJ !!!
Así es, ATENEA. Mejor reír que llorar, pero si hay algo que nos oprime el pecho, las lágrimas ayudan a descargarlo.
EliminarUn besazo.
Muy bueno, Pe.
ResponderEliminar"Las lágrimas, te limpian el alma y un alma limpia, es el mejor remedio contra la tristeza y el mejor aliado de la paz."
¡Anda que no! :-)
EliminarUn beso, Ro.
Muy cierto, llorar trae alivio y descanso.
ResponderEliminarBesitos
Es un desahogo importante.
EliminarBesos, Elysa.
Cuando el dolor o la pena son intensos, pero la rabia, la vergüenza o el orgullo lo son más, el contener el llanto se asume como valentía (casi siempre absurda) que daña solo al que reprime su sentir. Se piensa que quien llora demuestra cobardía, sin tomar en cuenta que valiente no es el que no llora, sino el que no claudica. Cuando la adversidad sobrepasa nuestras fuerzas, vale llorar, lo que no vale es rendirse.
ResponderEliminar¡Saludos!
Totalmente de acuerdo, Juan Carlos. Llorar, sí. Rendirse, jamás.
EliminarUn abrazo.
¿Qué pasa cuando estás demasiado asustado como para llorar?
ResponderEliminar¿Qué pasa si piensas que no sirve de nada? Vale; sí, te aligera emocionalmente y te alivia en cierto sentido porque descargas tensión, pero, ¿sirve para algo más?
¿De qué sirve llorar?
Y estoy de acuerdo con lo de que la última frase es impactante.
Y ¿qué más quieres? ¿no es suficiente el efecto válvula de escape?
EliminarEstá claro que llorar no soluciona los problemas, pero de alguna manera los aligera.
Gracias por comentar, Anónimo.
Ay, si no fuera por las lágrimas...! Acabaríamos explotando.
ResponderEliminarMe ha encantado tu microrrelato.
Besos.
Ya lo creo que sí, Ximo.
EliminarUn abrazo.
Gracias a ti, por venir a leer y comentar, Daniel.
ResponderEliminarUn abrazo.