-Siéntate -me dijo- tengo que decirte algo. Sorprendida por la seriedad de su rostro, tragué saliva y obedecí. Su voz sonó grave cuando, tras un incómodo silencio, disparó: -¡Ya no te quiero!
El proyectil, interceptado en algún punto de su trayectoria, se topó con un corazón blindado y rebotó.
Yo quiero un corazón así MJ!!
ResponderEliminarY por cierto, puedes con todo!!!
Un abrazo!!!
Ainhoa:
ResponderEliminarEl corazón estaba preparado para recibir ese balazo.
Un beso.
Sucede:
ResponderEliminar¡Jajaja! ¿Y quién no?
¡Uf! ¡Qué va! Más que poder con todo, yo diría que me atrevo con todo. Soy osada por naturaleza :-)
Un abrazo.
Patricia:
ResponderEliminar¡Qué bien! Tu opinión es importante para mí.
Gracias, de verdad.
Un beso grandote.
Exacto, ATENEA. Ojalá pudiéramos ser más fríos en determinadas ocasiones.
ResponderEliminarMe alegro de que te haya gustado. Gracias, bonita.
Un besote.
Me encanta el adjetivo 'contundente' Parece que poco a poco voy aprendiendo :-)
ResponderEliminarGracias, Sara.
Un beso.
Elysa, te recomiendo un chaleco antibalas ;-)
ResponderEliminarUn abrazo.
Estoy convencida de que así debe ser, Paloma.
ResponderEliminarNo obstante, mi pobre corazón dista mucho de estar blindado.
Un abrazo.
Muy chulo, María José. ¿Puede que sea reciclado de cuenta 140?
ResponderEliminarBesos.
Buena memoria, amigo.
ResponderEliminarAsí es, retocado y ampliado de un micro de cuenta 140 que no pasó la criba del Sr. Glez :-)
Un besote.
Ya lo comenté!!
ResponderEliminarMe gustó, me gustó, te decía creo recordar que le das a todo y a todo bien!! jeje
Abrazo!!!
Gracias por molestarte en comentar de nuevo, Sucede.
ResponderEliminarY mi respuesta decía más o menos que soy una osada :-)
Un abrazo.
Epa! muy bueno, en verdad me sorprendiste con tu giro final.
ResponderEliminarUn placer tu nuevo blog, MJ
Besos
Por lo menos, encontró un corazón blindado y no pudo atravesarlo :(
ResponderEliminarHoy va de desamor la cosa, ojalá pudiéramos blindar el corazón cuando nos viniera en gana, cuántos sufrimientos nos evitaríamos.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho.
Un beso
Ese sí que era un corazón a prueba de balas. Muy bueno. Conciso y contundente.
ResponderEliminarUn beso.
Ojala se pudiera blindar el corazón algunas veces.
ResponderEliminarBesos.
Alguien me dijo en alguna ocasión que blindar un corazón además de caro es irreversible. Por si era cierto, cuidado, la vida está llena de sorpresas.
ResponderEliminarUn abrazo
Muy chulo, María José. ¿Puede que sea reciclado de cuenta 140?
ResponderEliminarBesos
Patricia, Ainhoa, ATENEA, Sara, Elysa, Paloma muchas gracias por comentar.
ResponderEliminarBesos.
Torcuato, ¡qué memoria!
ResponderEliminarPues sí, lo reciclé ampliándolo un poquito.
Me alegro de que te guste.
Un abrazo.
Así es la vida civilizada, vamos esquivando proyectiles a todas horas. Por eso estamos tod@s tan abollad@s...
ResponderEliminarUn beso María José :)
¡Qué razón tienes!
ResponderEliminarUn abrazo, Ximo.
Hola MJ, soy Bruno, te pasaste por mi blog y te devuelvo la visita. Me ha gustado mucho tu sitio. Hasta otra. Saludos!
ResponderEliminarGracias, Bruno.
ResponderEliminarSaludos.
Me gusta, el final sorprende, no lo esperaba....
ResponderEliminarSe te dan BIEN las palabras, no me extraña que te nombraran ESCRIBIDORA OFICIAL:-)
¡Jeje! Ya sabes que esto de escribir siempre me gustó :-)
ResponderEliminarUn beso, Emma.
Preciosa metáfora.
ResponderEliminarGracias, Luis.
ResponderEliminarBesos.