martes, 28 de agosto de 2012

El amor es empatía



-¡Cómo hemos cambiado! –me dice. Y con un leve movimiento de cabeza trata de resaltar la importancia de esas tres palabras que pesan como el plomo.
-Sí, es cierto que ya no somos los mismos, cariño -le respondo-. Ahora tú eres yo y yo soy tú.

30 comentarios:

  1. Dos líneas de diálogo para resumir la historia vital de millones de parejas, MJ. ¿Qué hacer si no aplaudirte?

    Un abrazo,

    ResponderEliminar
  2. Tu micro encierra una verdad como un castillo, pero lo que más me gusta es el peso de las tres palabras, muy bueno.

    Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Y reconocer ese cambio es un gran paso.

      Un beso, Paloma.

      Eliminar
  3. Tu relato va más allá de ese refrán popular que dice: "dos que duermen en el mismo colchón, se vuelven de la misma opinión". Se confunden sus identidades.La foto que acompaña es total.

    Un abrazo,

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ja,ja, sí. Cuando la vi en Google me pareció muy apropiada.

      Un beso, Esperanza.

      Eliminar
  4. Dicen que cuando las parejas llevan mucho tiempo juntas hasta acaban pareciéndose físicamente. No sé si él y yo nos estamos pareciendo pero que compartimos gestos y lenguaje, es cierto.
    Me parece que en cuatro líneas pones la diana y que con el título das en el blanco.
    Un beso

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sí, eso dicen y en algunos casos es cierto que una pareja de viejitos acaba pareciéndose físicamente.
      Gracias por tus palabras, Ana.

      Un beso.

      Eliminar
  5. El título lo dice todo.
    Hay quien empatiza y otros mimetizan.
    Creo que ni una cosa ni la otra, todo en su justa medida, pero sin perder la identidad propia.

    Besitos mediterráneos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Tienes razón, Gala. Ante todo es importante no perder la propia identidad.

      Un besote.

      Eliminar
  6. La parejita tiene razón, después de muchos años juntos se acaba cambiando y no siempre es para mejor.
    Breve e intenso, MJ !!!
    Besos !!!

    ResponderEliminar
  7. Totalmente de acuerdo con este título. Y el micro es genial, una gran verdad.

    Besitos

    ResponderEliminar
  8. Muy logrado por múltiples razones. por el título, por el peso de las palabras, por la foto. Una joyita, MJ! clap clap clap

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias, Sandra. Da gusto leer comentarios como el tuyo :-)

      Un beso.

      Eliminar
  9. Así es el verdadero amor ¿no? Me encantó
    Un beso

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Así se va transformando el amor de una pareja.

      Un beso, Di.

      Eliminar
  10. Perfecta combinación de diálogo, título y fotografía. já,já...es lo que tiene pasar mucho tiempo con el mismo ....por esta razón hay algunas/os que lo/la cambian en cada estación, ¡así tienen una hamalgama de personalidades dispares! ;)

    Besos querida.

    ResponderEliminar
  11. Realmente el amor es un baile continuo de posiciones... Y no hablo sólo de la cama...
    Abrazos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Y así debe ser para que todo vaya bien en la pareja :-)

      Un abrazote, Miguelángel.

      Eliminar
  12. ¿Cambio de poder, de sexo...? En cualquier caso parece que a él no le hace mucha gracia. Seguro que ella gana.

    Abrazos de intercambio

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Cada pareja es un mundo, Lola. Pero en este caso es ella la que tiene las cosas muy claras.

      Un abrazo.

      Eliminar
  13. ¡Qué hermosa manera de quitar peso y dotar de belleza y sutileza a la inicial losa de esas tres palabras! La foto no podía ser mejor: me hace pensar en princesas que ya no lo son, en príncipes ranas; en la aceptación mutua sin adornos y sin subterfugios. En fin... he aquí algunas de las huellas que dejan tus palabras. Nos seguimos leyendo, MJ. Abrazos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sí que le has sacado partido a este micro, Isabel.
      Encantada de verte, siempre.

      Un abrazo.

      Eliminar
  14. Es que todos somos espejos.
    Besicos, Mariajo

    ResponderEliminar